Las aguas residuales son aguas de desecho que contienen una gran cantidad de sustancias contaminantes y que han sido empleadas para alguna actividad. Dependiendo de su origen y nivel contaminación, entre otros factores, las aguas residuales se dividen en distintos tipos, pues cada una requiere un proceso de tratamiento diferente.
Las aguas residuales domésticas o urbanas son las aguas contaminadas en asentamientos humanos (zonas residenciales, comerciales o institucionales) y en su mayoría son el resultado del contacto del agua con los desechos del cuerpo humano (heces y orina). Entre los tipos de aguas residuales domésticas o urbanas, estas son las denominadas aguas negras.
Las aguas polucionadas por actividades como bañarse, el lavado de la ropa, los platos y otros artículos o la limpieza de la casa se denominan aguas grises. Salen por los desagües de bañeras, lavaplatos, lavadoras, etc. y contienen materia en suspensión formada por grasas, detergentes y otros materiales. Las aguas grises pueden ser fácilmente reutilizadas para diversos usos después de un tratamiento sencillo. Será posible reutilizarlas para rellenar las cisternas de los inodoros, regar las zonas verdes o para la limpieza de exteriores.
Por otra parte, otro tipo de aguas residuales son las industriales. Las aguas residuales industriales son aquellas que han tenido contacto con contaminantes después de cualquier tipo de actividad industrial o proceso de producción. Su caudal y composición es muy diferente y más complejo que el de las aguas urbanas. Es muy común encontrar este tipo de aguas residuales en industrias como la textil, láctea, química, azucarera, papelera, entre otras.
Según el proceso desarrollado en cada tipo de actividad industrial, se vierte agua residual caracterizada por una contaminación determinada, así que es necesario su análisis detallado para definir el tratamiento requerido. Distinguir el tipo de aguas residuales que se pretende descontaminar es vital. El motivo de baja calidad en un proceso de tratamiento, muchas veces es debido a la poco cuidadosa caracterización del agua.